Celebrando la música flamenca en Granada

 

La música flamenca es uno de los tesoros más valiosos que España ha heredado de siglos de historia y de mezcla de culturas y civilizaciones.

 

Desde los griegos y los romanos hasta los cristianos mozárabes, los judíos y los musulmanes, a los que luego se unieron los gitanos con su arrolladora personalidad.

 

Rastrear los orígenes del flamenco es un poco como armar un rompecabezas.

 

Una pieza suena a música europea, con sus armonías y progresiones de acordes.

 

Otra pieza contiene escalas y patrones de acordes asociados a la música árabe.

 

También hay una pieza del norte de África, llena de ritmos y compases de origen bereber, los «sonidos negros» llamados por Lorca.

 

Y, por último, la pieza de guitarra, el instrumento que dio forma a la música flamenca tal y como la conocemos hoy.

 

Averiguar el origen exacto del término «flamenco» también es un misterio.

 

Hay muchas teorías, pero la más convincente se basa probablemente en la de Blas Infante, padre de la Autonomía Andaluza.

 

En su libro «Orígenes de lo flamenco» dice que deriva de las palabras árabes «Felah-Mengus«, que significan «campesino errante».

 

Una curiosa teoría es que Flamenco era el nombre de un cuchillo o navaja.

 

Sin embargo, esta hipótesis no ha sido aceptada, ni tampoco que se llamara así por el pájaro llamado flamenco.

 

Además, Antonio Machado dijo que «los gitanos llaman gachós a los andaluces y los andaluces llaman flamencos a los gitanos, aunque no sabemos la razón de este nombre».

 

Se ha escrito muy poco sobre el flamenco y, como toda tradición oral, sus orígenes siguen siendo un misterio.

 

Sin embargo, la propia música flamenca revela mucho sobre sus raíces.

El origen de la música flamenca

Fueron necesarios años de evolución, fusión y mezcla antes de que el flamenco se entendiera como un concepto único en el siglo XVIII.

 

Los orígenes de la música flamenca se remontan a la España árabe, y prueba de ello son sus sonidos característicos, que podrían proceder de los cantos monocordes islámicos.

 

Además, está el legado musical de los gitanos, que llegaron a Europa desde la India a principios del siglo XV.

 

Y los antepasados andaluces, por su parte, trajeron las melodías de los salmos, el sistema musical judío y los modos jónico y frigio inspirados en el canto bizantino.

 

Hay muchas teorías sobre su verdadero origen, pero nadie puede negar que sus evidentes raíces folclóricas se han perfeccionado hasta convertirse en una expresión artística única.

 

La música flamenca comenzó como un medio para expresar los asuntos cotidianos entre las gentes de Al Andalus, concretamente los gitanos.

 

Y se ha convertido en mucho más que música y baile apasionado.

 

Para los andaluces, es la esencia de su memoria y el ritmo mismo de su vida, su identidad.

 

A través del cante, el baile y la música.

El Cante

En la música flamenca, el cante es uno de los tres elementos fundamentales, junto con el baile y el toque.

 

Los cantaores expresan sus emociones más profundas de forma única y emotiva.

 

Y así, dependiendo de cada cantaor, el cante cambia de forma y crea su propio estilo profundamente auténtico.

 

El cante es un arte en sí mismo.

 

Dependiendo del sentimiento que exprese el cante, se divide de la siguiente manera:

 

• El cante chico, como las bulerías, las alegrías y los tangos, tratan del amor y la alegría.

• El cante grande o cante jondo, como la soleá, la seguiriya o las tonás, expresan sentimientos profundos y desgarradores, como la angustia y el dolor.

 

Además, el cante flamenco se puede diferenciar por la forma de interpretarlo.

 

Así, podemos encontrar:

 

• Cantes para adelante o pa’lante, son aquellos en los que el cantaor es el intérprete principal, cantando solo o acompañado de un instrumento musical, generalmente una guitarra.

• Cantes para atrás o pa’tras, donde el protagonista es el bailaor y el cantaor acompaña en segundo plano.

 

Andalucía es la cuna de la música flamenca y Granada es la cuna de grandes artistas conocidos en todo el mundo.

 

Enrique Morente es considerado un renovador del género.

 

El cantaor puso voz a poemas de Federico García Lorca, Francisco de Quevedo y Gustavo Adolfo Bécquer, además de fusionar el flamenco y el rock.

 

En su pieza «Morente sueña la Alhambra«, nos inspira su amor por su tierra natal, Granada.

La Guitarra

El sonido de la guitarra aparece enseguida al pensar en la música flamenca, pero no siempre ha estado presente en este género artístico.

 

En sus orígenes, la música flamenca era sólo cante y palmas, pero no fue hasta el siglo XIX cuando se incorporaron los instrumentos.

 

Con el paso del tiempo, la guitarra ha ido ganando protagonismo, pasando de ser un apoyo al cante a una parte esencial del folclore español.

 

Incluso se podría decir que la guitarra se ha fusionado con la voz para reinventar el flamenco tal y como lo conocemos hoy.

 

¿Sabía que la guitarra flamenca y la guitarra española no son lo mismo?

 

Aunque son muy parecidas, el cuerpo de la guitarra flamenca es ligeramente más estrecho, lo que la hace más fácil de tocar.

 

Además, el tipo de madera y la disposición de las cuerdas también son únicos en esta variedad.

 

La música flamenca ha hecho grandes tocaores a lo largo de los años.

 

Artistas de renombre mundial, como Paco de Lucía, han fusionado el flamenco con otros estilos musicales, buscando siempre la innovación.

El Baile

El baile flamenco apareció por primera vez en una forma estructurada reconocida en el siglo XVIII.

 

Al igual que la música flamenca, el baile está influenciado por las emociones de cada intérprete en el escenario.

 

Para crear un espectáculo totalmente único en cada actuación.

 

Los pies del bailarín flamenco lo transforman en músico, y sus instrumentos son sus zapatos.

 

El famoso zapateado flamenco, o taconeo, es una forma de baile muy específica.

 

Desde la postura corporal y el dominio del compás de cada estilo flamenco hasta la musicalidad, la fuerza y la velocidad.

 

Cada una de las partes del zapato flamenco, suela, punta y tacón, crean los sonidos característicos del zapateado flamenco.

 

Una de las bailarinas y coreógrafas de flamenco más conocidas es Sara Baras, con su estilo único, que sustituye los volantes y los vestidos vaporosos por un aspecto más clásico.

 

La música flamenca es como la propia Andalucía.

 

Una tierra de diversidad, un crisol de razas que realza su cultura única.

 

El flamenco no sólo representa a su pueblo, sino que lo distingue del resto y es la firma de identidad de la expresión artística andaluza.

 

De ahí que el 16 de noviembre de 2010 el flamenco fuera nombrado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.

 

Y un año después la Junta de Andalucía anunció la fecha como el «Día del Flamenco en Andalucía«.

 

Desde entonces, celebramos esta importante fecha con multitud de eventos relacionados con el flamenco: conferencias, exposiciones, conciertos, espectáculos…

 

Sin duda, Granada es uno de los principales centros flamencos de España y, especialmente, el Sacromonte.

La música flamenca en Granada, Sacromonte

El Sacromonte, situado en la colina de Valparaíso, es el antiguo barrio gitano.

 

En las cuevas del Sacromonte se celebran desde hace siglos las zambras, fiestas de cante y baile que solían durar hasta la madrugada.

 

Siguen siendo uno de los espectáculos tradicionales más espectaculares que ningún visitante de Granada debería perderse.

 

Para una experiencia realmente inolvidable, le sugiero que camine por sus encantadoras calles y se empape de la jondura y el duende.

 

Le invito a disfrutar de un recorrido a pie de 2 horas por los barrios del Sacromonte y del Albaicín, nuestra joya más antigua.

El Sacromonte es el barrio gitano de Granada, famoso por sus casas cueva y su zambra gitana nocturna.

 

El Albaicín, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1994, con su relevancia cultural y su peculiar arquitectura medieval perfectamente fusionada con el estilo tradicional mediterráneo.

 

Ambos barrios ofrecen impresionantes vistas panorámicas de la ciudad nazarí, donde la belleza y el tiempo nos susurran desde cada balcón.

También conoceremos a los más castizos, auténticos y pintorescos lugareños.

 

Póngase en contacto conmigo para descubrir juntos el fascinante patrimonio musical del flamenco en Granada y el tesoro cultural que se esconde en cada rincón de esta fantástica ciudad.